En junio de 2023, se logró la finalización de la construcción de la Iglesia Jesús en Fengxian Qixian, obra concebida por Wutopia Lab, tras ocho años de trabajo. Requiere un poco de tiempo para recordarla debido a ciertos cambios en su aspecto y porque las razones detrás de su diseño en ese momento resultan un tanto confusas. Sin embargo, en aquel momento, la utilización de la translucidez como una manifestación contemporánea de lo que se interpretaba como la belleza sutil de Jiangnan y las fuerzas resilientes que la respaldan generó una profunda fascinación.
Se busca la singularidad con cierta moderación. El propósito consistía en la separación de las estructuras principales y secundarias. La elección fue emplear el salón principal de 16.7 metros de altura como el núcleo central del edificio principal. En sus lados oeste y norte se incorporaron oficinas y otras instalaciones, mientras que el pequeño auditorio se ubicó en la parte superior del área de oficinas, creando así una comunidad vertical. Por su parte, el edificio auxiliar corresponde al comedor.
La estrategia más destacada fue considerar todo el terreno como una entidad única denominada «lugar». Se erigió una especie de «velo» translúcido que serviría como límite visual alrededor de la línea de control arquitectónico. Los edificios principal y auxiliar se conciben como estructuras contenidas dentro de este espacio delimitado por el «velo». Juntos, junto con el límite visual del «velo», constituyen una expresión arquitectónica integral, formando un lugar completo.
Después, se deseaba preservar una sensación de equilibrio en el interior del edificio. Sin embargo, en la planificación del terreno, se tomaron dos decisiones clave: en primer lugar, se ajustaron las líneas centrales del edificio principal para que fueran paralelas, pero no alineadas con el centro de la base; y en segundo lugar, se dispuso que las líneas centrales del auditorio fueran paralelas entre sí, pero no alineadas con la línea central del edificio principal.
Esta nueva disposición no solo evita la rigidez de la simetría convencional, sino que también abre oportunidades para una vitalidad animada, al tiempo que mantiene la importancia de la simetría en áreas específicas. Un beneficio adicional de este ajuste es que el primer piso del auditorio puede orientarse directamente hacia el sur. En días de buen tiempo, el salón principal puede abrirse completamente hacia el sur, permitiendo que el espacio exterior se utilice como una extensión del entorno del auditorio. Esto también refleja mi esfuerzo por integrar el exterior con el auditorio.
El «velo» translúcido se presenta como uno de los recursos que se empleó para expresar la luminosidad tenue característica de Jiangnan a través de la arquitectura. Este elemento tiene la capacidad de manifestar sombras en la interfaz visual, las cuales varían conforme a la luz natural del día. Estas sombras pueden surgir como proyecciones o reflejos de elementos tanto naturales como creados por el ser humano.
Asimismo, logra crear una iluminación solar filtrada en este espacio delimitado por la interfaz visual. Esta iluminación resulta menos intensa pero algo indeterminada, similar al clima que caracteriza a Jiangnan, donde uno se encuentra. Lo más destacado radica en que esto implica que el espacio contenido en la interfaz representa un lugar en sí mismo y adentrarse en él equivale a ingresar a un nuevo territorio.
Se implementó una rejilla densa en el auditorio con el propósito de establecer una barrera visual interna que interactuara con los tragaluces ubicados en dirección norte-sur. Si no fuera por consideraciones de coste, se habría modificado ligeramente la disposición de la rejilla para generar un reflejo de carácter indefinido.
No obstante, el diseño actual también cumple su función, ya que los reflejos verticales continuos generados por la rejilla de aluminio y los tragaluces se combinan para crear una especie de cortina luminosa que da la sensación de una pantalla de lluvia. La audiencia se encuentra inmersa en este espacio dentro de la cortina de luz, la cual no es tan intensa, pero la envuelve por completo, proporcionando una experiencia en sintonía con sus emociones.
Se optó por emplear diversas tonalidades de gris para pintar distintas secciones del edificio principal. Las tonalidades de tinta se distribuyen en cinco colores que se diseminan con tranquilidad en la ligera neblina que se encuentra sobre las aguas de Jiangnan.
Se optó por utilizar una malla expandida en lugar de aluminio perforado o paneles solares para el «velo» debido a su mayor economía y su capacidad para reducir la resistencia al viento de manera más eficaz. Para asegurar la solidez y seguridad del «velo», se decidió aumentar la sección transversal de las columnas que lo sostienen, al tiempo que se incorporaron puntales diagonales en intervalos a dichas columnas.
Con el fin de evitar la necesidad de aprobaciones adicionales y el aumento de los costos debidos a desviaciones, se acordó también añadir columnas a ambos lados del auditorio principal para evitar grandes claros en la estructura y se descartó la idea de incluir dos vigas considerables atravesando el techo curvado, lo que habría interrumpido la luz cenital. No obstante, para mantener el control de los gastos, se optó por sustituir la pared de rosas por una pared de ladrillos florales. No se aceptaron algunos cambios propuestos, como un sistema arquitectónico que habría implicado la protrusión de soportes desde la estructura principal para ayudar en la sujeción del «velo», ya que se prefería mantener límites claros y definidos en el diseño.
Fuente: archdaily.mx