Ubicación y Contexto del Proyecto (Casa Sinaí en Querétaro)
Casa Sinaí se ubica en un suburbio de Querétaro, dentro de un desarrollo residencial relativamente nuevo que ofrece amplias posibilidades para el diseño arquitectónico. Este contexto permitió a los arquitectos experimentar con la privacidad y la integración fluida de la casa con el espacio común del jardín. La flexibilidad del desarrollo fue crucial para crear una residencia que maximiza tanto la funcionalidad como la estética.
Diseño en Forma de «L» para Aprovechar la Orientación Solar
Para abordar el desafío de los intensos rayos del sol occidental, el diseño de Casa Sinaí adoptó una forma en «L» orientada hacia el sureste. Esta configuración no solo optimiza la exposición al sol, sino que también aprovecha la pendiente natural del terreno hacia el sur. Al rebajar el nivel de la planta baja, los arquitectos lograron aumentar la altura de los espacios interiores, lo que contribuye a un ambiente más abierto y luminoso.
Conexión Fluida entre Espacios Interiores y Exteriores
La disposición en «L» facilita una conexión fluida entre el área social de la casa, la terraza y el jardín. Este diseño crea un ambiente de vida continuo y armonioso, integrando el espacio interior con el exterior de manera natural. La terraza se convierte en una extensión del área social, ofreciendo un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de las vistas al jardín.
Vestíbulo de Doble Altura y Espacios Interiores
En el primer piso, las habitaciones y la sala de televisión están organizadas alrededor de un vestíbulo de doble altura. Este espacio central no solo proporciona una transición elegante entre las áreas de descanso y entretenimiento, sino que también conduce a una terraza con vistas impresionantes. La altura del vestíbulo realza la sensación de amplitud y luminosidad, complementando la funcionalidad del diseño.
Conclusión
Casa Sinaí es un ejemplo destacado de cómo la flexibilidad en el diseño residencial puede aprovecharse para crear un hogar que equilibre la privacidad con la conexión al entorno. La forma en «L», la orientación estratégica y la integración fluida con el jardín son elementos clave que contribuyen a su diseño innovador y funcional. La residencia no solo responde a los desafíos del sitio, sino que también ofrece un espacio de vida continuo y armonioso, adaptado a las necesidades de sus habitantes.
Fuente: archello.com